1. Cubre el fondo del contenedor con material marrón liviano siempre que sea posible.
Para empezar la pila, añade hojas u otros residuos de jardín secos que tengas disponibles. Lo ideal es que esta capa tenga unos centímetros de profundidad para darle a la pila una buena base sólida.
Si no dispones de ningún material marrón, aún hay otras formas de empezar la pila: utiliza una capa fina de tierra de jardín o composta recién terminada para introducir las bacterias adecuadas.
2. Recolecta materiales de compostaje verdes.
Los materiales verdes (con un alto contenido de nitrógeno) sirven para activar el proceso de calentamiento en la composta. Algunos materiales generadores de calor perfectos para esto son la maleza joven (antes de desarrollar semillas), las hojas de consuelda, la aquilea y el césped cortado. Otros materiales verdes buenos para el compostaje son las frutas y verduras, los residuos de frutas y verduras, el café molido, las hojas de té (incluidas las bolsitas de té sin la grapa) y el estiércol de pollo, pavo, vaca o caballo.
Evita sobre todo compactar grandes cantidades de materiales verdes, puesto que pueden volverse anaeróbicos con rapidez. Esto implica que no habrá suficiente oxígeno para que los microbios más beneficiosos se desarrollen y descompongan los materiales de compostaje.[10
3. Utiliza muchos materiales marrones.
Estos son ricos en carbono y actúan como la "fibra" para la composta. Entre los materiales marrones figuran las hojas de otoño, la maleza y las plantas muertas, el aserrín, la paja, las flores viejas (incluidos los arreglos florales secos sin los accesorios de plástico o espuma) y el heno.
4. Añade otros materiales al depósito de composta.
Otros materiales que puedes compostar son las toallas de papel, las bolsas de papel, las prendas de algodón (rasgadas), las cáscaras de huevo y los pelos (de humano, perro, gato, etc.). Sin embargo, debes utilizar todos estos materiales con moderación.[11]
5. Coloca diversos materiales en capas en el contenedor.
La pila de composta ideal debe ser entre 3 partes de materiales marrones por 1 parte de materiales verdes o mitad y mitad de ambos materiales, dependiendo de los materiales que tengas a tu disposición. Dichos materiales deben entrar en contacto uno con otro y colocarse en capas finas de solo unos centímetros de profundidad.[12]
6. Cubre el depósito de composta o entierra los residuos de alimentos bajo una capa de residuos de jardinería.
Si deseas incluir residuos de alimentos en la pila de composta, debes ser cuidadoso para no atraer animales e insectos y generar malos olores. Para detener dichos problemas, cubre todo el contenedor con una tapa o cubre de inmediato los residuos de cocina con una capa de residuos de jardinería.[13]
En caso de no tener residuos o recortes de jardinería recientes para añadir, mete los residuos de cocina bajo la capa superior existente en el depósito de composta.